El reto:
Traducir la creatividad de un estudio de arquitectura en una web que respira movimiento. Una web donde cada detalle sorprende, cada sección te invita a interactuar y cada proyecto se presenta como lo que es: una idea hecha espacio.

El diseño:
Olvídate de lo típico. Aquí no hay bloques aburridos ni galerías estáticas. Hay fluidez, ritmo y una navegación que juega, se despliega y cambia en cada scroll. El blanco y negro de la web deja todo el protagonismo a las imágenes y los planos, mientras que los efectos y animaciones aportan ese “algo” que la hace diferente.

La experiencia:
La web se adapta a cualquier pantalla, manteniendo siempre ese aire de estudio de autor: moderno, valiente y sin miedo al cambio. El usuario nunca es espectador pasivo; aquí es parte del viaje, porque cada sección invita a explorar y quedarse un poco más.

El resultado:
Una web que refleja la visión de Nadal i Vila: arquitectura que se mueve, que evoluciona, que vive. Un espacio digital tan flexible y personal como los proyectos que firman.